Marzo 13-19, 2016 - Semana Nacional de la Agricultura
Una plaga diminuta crea un problema enorme
¿A quién no le gusta el jugo de naranja? California es el principal productor de naranjas frescas en los Estados Unidos y líder en la producción nacional de limones, limas y mandarinas. La producción de cítricos en California genera 2 mil millones de dólares anualmente. Alrededor del 60 por ciento de los residentes de California tienen un árbol de cítricos en su jardín o traspatio.
Pero una plaga amenaza con diezmar estos frutales. Es el psílido asiático de los cítricos (ACP, por sus siglas en inglés) que transmite una enfermedad fatal, llamada huanglongbing, para la que no hay cura. En el 2008 se le detectó por primera vez en el sur del estado, y para frenar su avance, las autoridades, agricultores y expertos trabajan juntos en programas de información, detección y erradicación.
El Programa de Prevención de Plagas y Enfermedades en Cítricos (CPDPP), financiado por productores de cítricos, lleva a cabo un programa estatal de detección. De igual manera, los productores están tratando sus terrenos y proporcionando fodos al Departamento de Alimentos y Agricultura de CA (CDFA) para que traten cítricos infectados en viviendas aledañas a los plantíos comerciales de cítricos.
Por otra parte, expertos de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California (UC ANR) han venido implementado estrategias de control biológico. En las áreas urbanas, donde se dificulta aplicar pesticidas, se ha liberado un enemigo natural, la Tamarixia radiata, una avispita depredadora originaria de Pakistán, para detener el avance del psílido
UC ANR lleva a cabo una campaña de información para alertar al público acerca de la presencia del psílido asiático de los cítricos en árboles en jardines y traspatios con el arribo de la primavera. Se pide a los residentes que reporten cualquier hallazgo a la línea para reportar plagas de CDFA, 1-800-491-1899. Solo así se logrará reducir las poblaciones de psílidos y frenar su avance para darles tiempo a los investigadores a desarrollar una cura para la enfermedad.
Más información en este sitio, http://ucanr.edu/sites/ACP/.
Agua pura en comunidades rurales
Uno de cada diez residentes en las regiones agrícolas más productivas de California –donde se encuentran algunas de las comunidades más pobres- están expuestos a niveles de nitrato peligrosos para su salud al beber agua potable.
Los nitratos son compuestos químicos usados comúnmente en la agricultura que pueden contaminar fácilmente los mantos freáticos o pozos de agua subterránea, que las comunidades rurales usan para obtener agua potable y para regar sus cosechas.
Fue así como en el 2008, la Junta de Control de Recursos Hídricos, a pedido de la legislatura, pidió a un equipo interdisciplinario de la Universidad de California en Davis -conformado por expertos en hidrología, ingeniería, ciencias del suelo, economía e informática- a que llevaran a cabo un estudio en dos zonas muy vulnerables: la cuenca del lago Tulare y el Valle de Salinas, en donde alrededor de 2.6 millones de personas dependen del agua del subsuelo.
Las recomendaciones del estudio se consideran fundamentales para muchas de las agencias que, de una forma u otra, tienen que ver con este problema, entre ellas: el Departamento de Alimentos y Agricultura (CDFA), Salud Pública, Recursos Hídricos y Juntas de Agua regionales y municipales.
Los hallazgos demostraron que la Universidad de California tiene los componentes necesarios para, en base a la investigación, identificar problemas y sugerir soluciones que ayuden a forjar iniciativas de ley en beneficio de las comunidades.
Trabajo en equipo para limpiar la tierra
Los huertos urbanos son una alternativa para la sustentabilidad y la producción local de alimentos, especialmente para las comunidades con poco acceso a frutas y verduras frescas. Además de proveer alimentos sanos y nutritivos, estos jardines fortalecen los lazos comunitarios.
Pero también hay que ver la otra cara de la moneda: el riesgo de contaminantes, como plomo, en el suelo.
El plomo en el suelo es una fuente de polución menos conocida que el plomo en la pintura. Pero igual afecta la salud, sobre todo cuando los niños lo inhalan o ingieren accidentalmente. Los puntos de mayor riesgo son las casas viejas ubicadas en vecindarios en zonas marginales, donde, por lo general, hay poco acceso a alimentos nutritivos.
Con el fin de apoyar y fomentar comunidades saludables, sustentables y equitativas, la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California implementó un programa interdisciplinario de investigación en el que participan ecologistas y científicos sociales que trabajan en coordinación con agencias no lucrativas y las comunidades.
Los investigadores han hecho pruebas de plomo en 75 traspatios en vecindarios de bajos recursos en el norte y sur de Sacramento. Los resultados ayudan a determinar dónde plantar huertos urbanos y qué hacer para mantener los contaminantes fuera del jardín. Los investigadores entregan personalmente a los residentes mapas de sus propiedades, responden a sus preguntas y les enseñan opciones de bajo costo para aminorar los niveles de plomo. La información recabada ayudará a determinar el papel que juega el paisajismo en la distribución del plomo.
El programa sigue vigente y está por verse si está labor de equipo puede traducirse en un cambio a mayor escala. Pero por lo pronto, al incluir en este proyecto a los dueños de viviendas, se está asegurando que la información llegue a los más interesados.
Hasta hace pocos años, los padres de familia no sabían qué pesticidas se usaban en las escuelas. Era un misterio y una preocupación. Sin embargo, en el 2001 se promulgó la Ley de Escuelas Saludables (Healthy Schools Act) que reconoció el ‘derecho a saber’ a qué tipo de productos químicos estaban expuestos los niños y adultos, dentro y fuera de las instalaciones escolares.
Esto presentó un reto para escuelas con fondos y tiempo limitados. ¿Cómo combatir las plagas con métodos menos tóxicos? Encontraron la solución en el Manejo Integrado de Plagas (IPM, por sus siglas en inglés) que busca reducir o eliminar el uso de plaguicidas y de minimizar el impacto al medioambiente.
Fue así como asesores agrícolas y especialistas de Extensión Cooperativa de la Universidad de California (UCCE), en colaboración con el Departamento de Regulación de Pesticidas, llevaron a cabo entrenamientos prácticos, por todo el estado, para personal escolar dedicado al cuidado de zonas verdes y jardines en las escuelas. Los participantes aprendieron a analizar el tipo de suelo, identificar y controlar plagas y malezas, y a evaluar la eficacia del riego.
Setenta y cinco representantes escolares ya han puesto en práctica las recomendaciones en sus respectivas escuelas. Ellos reconocieron que muchos problemas pueden evitarse usando los métodos apropiados de irrigación, siembra y fertilización, en lugar de recurrir a los pesticidas. El programa IPM para escuelas saludables, fue tan exitoso, que en los últimos 2 años se ha extendido a cuatro áreas más: Chico, Vista, Santa María y Fremont.
Los pequeños agricultores contribuyen en grande a la agricultura
¿Ve la posibilidad de que la guayaba se produzca en un clima semi-desértico? Esa fruta, originaria de climas tropicales, ya se cosecha en San Diego, lo mismo que la pitahaya y el tejocote.
California se distingue de otras regiones agrícolas del país por su enorme diversidad de cultivos. Cada vez se ve una mayor variedad de frutas y verduras étnicas disponibles en los mercados locales, gracias a las contribuciones de los pequeños agricultores.
Alrededor del 80 por ciento de los agricultores en el estado trabajan a pequeña escala, es decir generan menos de 250 mil dólares al año. Muchos son inmigrantes con poca experiencia en técnicas de cultivo y administración de negocios. Ofrecer capacitación a esos pioneros es crucial para el futuro de la agricultura estatal, y la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California (UC ANR) ha estado atendiendo desde hace varios años esa necesidad.
Por ejemplo, desde el 2008, se viene efectuando en los condados Placer y Nevada un taller anual de seis semanas sobre la planificación y administración de proyectos agrícolas. Los participantes aprenden acerca de análisis empresarial, planificación para obtener ganancias, flujo de efectivo, analisis de operaciones, gestión de riesgos y mercadotecnia. Al final del curso, desarrollan un plan de acción para los siguientes 6 meses. Los talleres han dado muy buenos resultados; una encuesta entre los asistentes halló que el 79 por ciento puso en práctica un plan de gestión sobre riesgos; 41 por ciento amplió sus operaciones y 39 por ciento reportó un aumento en sus ganancias.
También en otras regiones del estado, se han organizado recorridos a mercados y centros de distribución de alimentos para ayudar a los pequeños agricultores a encontrar nuevos mercados para sus productos.
Estos recorridos han sido organizados por asesores agrícolas de Extensión Cooperativa y el Programa de Investigación y Educación de Agricultura Sustentable de UC ANR (UC SAREP)
Expertos evalúan nuevos métodos de riego en el campo
¿Sabía usted que para poder alimentar a la población mundial en cuatro décadas los agricultores deberán aumentar en 70 por ciento la producción agrícola?
El mayor desafío que enfrentan los agricultores es producir más alimentos, fibra dietética y alimentos para animales con menos agua. Para lograr esta meta es necesario desarrollar e implementar mejores técnicas de riego y tecnologías para el manejo de cultivos.
En los últimos años, un grupo de investigadores, agricultores y personas del sector privado han venido trabajando en el Centro West Side de Investigación y Extensión de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California (UC ANR), para desarrollar mejores sistemas y tecnologías para el manejo del agua y cultivos. Su labor se ha enfocado en sistemas precisos de riego aéreo o subsuperficiales de goteo, que ya se utilizan en otras parte del país y que ofrecen mayor uniformidad en la distribución del agua, menos desperdicio y más ahorros en los costos de producción.
Los expertos encontraron que combinando el sistema de riego por aspersión con la siembra directa, lo que inglés se llama no-till farming y que significa cultivos sin dañar la tierra con la labranza y el arado, ha sido posible disminuir los niveles de evaporación del agua hasta en un 13 por ciento, en un verano promedio, cuando se mantiene una capa gruesa de residuos en la superficie de la tierra. Estas nuevas técnicas de cultivo son una oportunidad para disminuir el uso de agua, lo cual es crucial, para continuar produciendo alimentos.
Por más de 100 años, investigadores y educadores de Extensión Cooperativa de la Universidad de California han aprovechado la experiencia y conocimientos locales para llevar a cabo investigaciones en torno a la agricultura, el medioambiente, la economía, desarrollo juvenil y la nutrición que contribuyen a la prosperidad de California. Extensión Cooperativa de la UC es parte de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California. Más información en ucanr.edu.