El invierno, ¿temporada para la poda?

Jan 26, 2006

MODESTO-(UC)— Muchas personas consideran el invierno como la época ideal para la poda. Aunque esto es cierto en muchos casos, hay varios factores que considerar.

 

“La mejor temporada para podar depende del tipo de planta y los resultados que se desean al podarla”, apunta Ed Perry, asesor agrícola de Extensión Cooperativa de la Universidad de California.

 

Si la poda va a ser ligera, puede hacerse en cualquier época del año. Es más fácil quitar ramas que no se deseen cuando están pequeñas. Además, será menos probable que detengan el crecimiento total de la planta, incluso al podar ramas rotas, muertas, débiles o que reciben sombra en abundancia.

 

La salud de árboles y arbustos perennes se verá menos afectada si los poda justo antes de empezar la época de crecimiento en la primavera, que generalmente es después de que comienza a hacer más calor, ya entrada la estación. La poda en estas condiciones mantiene la producción de hojas por el mayor tiempo y las hojas nuevas ayudan a ocultar los cortes de la poda.

 

Si desea detener el crecimiento de plantas, árboles y arbustos que crecen en un lugar donde el espacio es limitado, pode cuando casi terminen de crecer. En muchos casos, esta época se extiende desde finales de la primavera hasta mediados del verano. Por ejemplo, muchos jardineros mantienen árboles frutales en espacios reducidos podándolos en el verano, pues hacerlo en esta época tiene el mayor efecto en reducir la producción de hojas. Sin embargo, la poda no debe ser tan severa ni tan temprana en la época como para fomentar el crecimiento de brotes nuevos. Si poda en la primavera árboles y arbustos ornamentales de hojas perennes en lugares muy visibles, trate de hacer los cortes en sitios donde no se vean fácilmente.

 

Es posible guiar eficazmente el crecimiento de árboles jóvenes de todo tipo durante la primavera y el verano. Fomente el crecimiento de las ramas que desee quitando o reduciendo el follaje de las que compitan contra ellas o quitando por completo éstas últimas.

 

La poda para resolver problemas puede hacerse en cualquier época. Sin embargo, es más fácil detectar algunos problemas durante la época de crecimiento por ser más obvios. Por ejemplo, en los árboles frutales, las ramas que queden demasiado bajas por el peso de la fruta, deben podarse o quitarse cuando tengan fruta. Las ramas muertas o débiles deben quitarse en el invierno, pero con frecuencia es más fácil identificarlas y podarlas durante el verano.

 

En el caso de los árboles en florecimiento, la mejor época para la poda depende de la manera en que florecen. Los que florecen durante la temporada en curso deben podarse durante el invierno, antes de que empiecen los brotes de primavera. Si desea grupos grandes de flores, haga una poda moderada a extensa.

 

Las plantas que florecen en la primavera de botones en vástagos que ya cumplen un año, especialmente los árboles frutales que florecen, deben también podarse durante o hacia el final del período de florecimiento. Así se puede disfrutar de las flores y podar para fomentar el crecimiento vigoroso para el florecimiento del año siguiente.

 

En ocasiones, hay escurrimiento de jugos o fluidos en los cortes de la poda. Los árboles que más “sangran” son los olmos, arces, moreras y robles. Este problema es peor si se hace la poda justo antes de empezar el período de crecimiento en la primavera. El sangrado generalmente no daña al árbol pero si es mucho y dura por mucho tiempo, puede dañar la corteza del árbol debajo del corte de la poda. Para reducir la posibilidad de tal sangrado, asegúrese de que los cortes de la poda son pequeños (menores de tres pulgadas) y haga la poda durante el otoño o a principios del invierno.


By Myriam Grajales-Hall
Author - Communications Manager