OROVILLE-(UC)— Muchas frutas y verduras que cuelgan de los árboles o se cosechan en huertos caseros tienen barreras naturales, como la piel o cáscara, contra los microbios. Sin embargo, es importante tener en cuenta que al tocarlos, las manos las pueden contaminar y transmitir enfermedades a menos que se pongan en práctica medidas de salubridad.
“La variedad en cuanto a la extensión de los huertos caseros, las prácticas de uso en la siembra, el cultivo y cosecha, así como en la preparación de alimentos hacen que sea poco realista tener un sólo método para asegurar la salubridad de los frutos del huerto”, apunta Susan Donahue, consejera en nutrición y asuntos de la familia y del consumidor de Extensión Cooperativa de la Universidad de California.
Para reducir la posibilidad de contaminación, causada por factores internos o externos, de la verduras, legumbres y frutas del huerto casero, la especialista recomienda que se pongan en práctica las siguientes recomendaciones:
- Esté al tanto de cambios en la calidad del agua, según las estaciones, que se pueden presentar en las fuentes de aguas que use para regar el huerto.
- Asegúrese de que el diseño y mantenimiento de sus pozos de agua sea tal que eviten la filtración o paso del agua de riego a los pozos.
- Use métodos de riego que reduzcan el contacto entre el agua y las partes comestibles de la planta.
- Aprenda cómo tratar el abono vegetal o compost casero para reducir los microbios, especialmente si usa estiércol de animales.
- Deje que pase el máximo de tiempo entre las aplicaciones de estiércol de animales al huerto y la cosecha de frutas y verduras.
- Si piensa usar estiércol líquido o té de estiércol para nutrir el follaje y controlar plagas, analice con detenimiento su huerto para determinar si esta práctica puede contaminar directa o indirectamente las frutas y verduras.
- Esté consciente de que los guantes de jardinería pueden transmitir agentes contaminantes de un lugar a otro.
- Reduzca al mínimo la posibilidad de que cualquier animal portador de gérmenes o virus se sienta atraído por los canastos o cubos que tenga para la cosecha.
- Antes de usarlo, lave muy bien cualquier contenedor para la cosecha, al igual que toda superficie que entre en contacto con las frutas o verduras.
- Como medida de seguridad, quite por lo menos 1 pulgada alrededor de la parte dañada de una fruta o verdura si va a comerla tan pronto la coseche y si va a refrigerarla sin demora.
- En casa, la práctica recomendable es lavar muy bien, bajo un chorro de agua potable y con un cepillo para frutas y verduras, todo lo que coseche para quitar posibles contaminantes.
Para más información acerca de este tema, puede imprimir el folleto en inglés,“Key Points of Control and Management of Microbial Food Safety Concerns for Edible Landscape and Home Gardening” disponible en http://ucce.ucdavis.edu/files/filelibrary/5453/4364.pdf