RIVERSIDE-(UC)—
Los intereses hipotecarios bajos continúan atrayendo a consumidores a
refinanciar su hipoteca o comprar una casa. Estimulan también el deseo por parte
de algunos prestamistas y contratistas de aprovecharse de los consumidores. La
mejor defensa es enterarse de las tramas que pueden usar.
“Si
necesita algo de dinero extra, algunos prestamistas le animarán a refinanciar su
hipoteca varias veces. Cada refinanciamiento incluye cargos adicionales, y usted
puede acabar con una tasa de interés mayor a la que tenía originalmente”,
precisa Karen Varcoe, especialista en asuntos del consumidor con la Extensión
Cooperativa de la Universidad de California. “Si sus pagos aumentan demasiado,
usted puede correr el riesgo de perder su casa”, apunta.
Al
tratar con un prestamista, es importante también asegurarse que el contrato no
incluya cargos innecesarios o por servicios inexistentes, o que se le pida que
compre un seguro que no es requerido. Estas son artimañas que los prestamistas
deshonestas usan.
Por
otra parte, algunos contratistas sin escrúpulos pueden sugerir al comprador de
una casa reparaciones caras e innecesarias para luego ofrecer financiamiento a
través de un prestamista que conoce, y quien envía los pagos del préstamo
directamente al contratista. Con frecuencia, el trabajo queda mal hecho o sin
terminar, y el consumidor queda con la responsabilidad de un préstamo a largo
plazo con una tasa de interés alta.
Varcoe hace hincapié en la importancia de estar siempre alerta, observando que algunos prestamistas desaniman al consumidor de saldar su cuenta dándole información incorrecta o haciendo que paguen más de lo que deben.