FRESNO
- (UC)—
La papaya, fruta que se da principalmente en clima templado y húmedo, podría ser
un cultivo lucrativo para agricultores a pequeña escala en California, gracias a
una gira de estudio reciente a México que hicieron asesores agrícolas de
Extensión Cooperativa de la Universidad de California.
“La papaya es muy económica para cultivar, aun en comparación a
verduras comunes como la calabaza”, precisa Manuel Jiménez, consejero agrícola
con Extensión Cooperativa en el condado de Tulare. Por otra parte, el arándano
azul o blueberry es un cultivo especializado cuya popularidad va en
aumento, pero es “excesivamente caro darle inicio”,
apunta.
Seis consejeros agrícolas de Extensión Cooperativa visitaron el
estado de Veracruz del 19 al 23 de mayo de este año para estudiar métodos de
cultivo en uso para la papaya, mango, tamarindo, piña, guanábana, zapote,
marañón, vainilla, mangostán y litchi. A pesar de la enorme diferencia de clima,
existe el potencial de cultivar muchos de estos productos en granjas e
invernaderos californianos.
El Centro Kearney de Investigación y Extensión de la UC actualmente
estudia las papayas. Considera Jiménez que esta delicia tropical podría
integrarse a los cultivos de rotación de algunos agricultores a pequeña escala.
Las papayas no parecen sufrir bajo el cálido sol veraniego de la zona
central de California y, a pesar de no darse el primer cultivo en el Centro de
Investigación y Extensión, Jiménez no se ha desanimado. Las papayas verdes
pueden guisarse y son populares entre consumidores de antecedentes asiáticos.
Pueden hornearse como las calabazas invernales o prepararse en chutney,
condimento picante hecho de frutas,
especias y hierbas aromáticas.
En California, la mayoría de las papayas maduras de venta en los
supermercados provienen del Hawai o de México. Esta fruta es rica en vitamina
C.
La producción comercial de papaya a nivel mundial se ha visto
impactada ya que la planta es muy susceptible a viruses. En Hawai, la mayoría
del cultivo de papayas ha sido modificado genéticamente para aumentar su
resistencia a enfermedades. En Veracrúz, el principal estado productor de papaya
en México y lugar de la gira de estudio, los agricultores están viendo que
cultivar este árbol perenne como cultivo anual ayuda a reducir las pérdidas por
viruses.
En el Rancho Nevería, cerca de la ciudad de Cardel en Veracruz, el
agrónomo Honorio Fernández describió a los consejeros agrícolas de la UC el
sistema de producción anual de papaya del rancho. Basándose en sus apuntes meticulosos, Fernández
detalló información acerca de la mezcla de tierra en la cual sembrar la papaya
hasta a qué distancia se deben sembrar las plantas en el campo. Se trasplantan
aproximadamente 2,700 plántulas por hectárea. Para cuando llega la cosecha, se
ha arrancado un cuarto del total por infección viral. No obstante, las 2,000
plantas que quedan, aproximadamente, producen un cultivo rentable antes de
perderse por enfermedad.
En el mencionado rancho, las plantas se cultivan primero en lugares
protegidos con malla metálica y luego se trasplantan al campo en cualquier época
del año, lo que brinda a los granjeros la opción de calcular la cosecha para la
época en que piensan que obtendrán el mejor precio. El clima de California no
ofrece tanta flexibilidad a los agricultores. El invierno normal en el Valle de
San Joaquín mataría a las plantas; esto evita que diciembre y enero formen parte
de la temporada de cultivo de la papaya.
Sin embargo, Jiménez precisa que tratará de plantar papaya hacia fines del verano y proteger los arbustos mientras son pequeños bajo una “casa de aros” (hoop house) movible, implemento del que ya disponen muchos productores de verduras.
“Este cultivo da muchas satisfacciones”, precisa Jimenez. “Me gustaría ver a algunos agricultores tratar de cultivar algo como la papaya”.