YREKA-(UC)-- Con la llegada de un nuevo año muchas veces nos hacemos propósitos y nos trazamos metas que no siempre podemos lograr. Pero no se desanime. Tenga en cuenta que los propósitos se deben escoger con cuidado para que sean tanto efectivos como fáciles de cumplir.
Yvonne Steinbring, consejera de nutrición y asuntos de la familia y del consumidor con Extensión Cooperativa de la Universidad de California, sugiere que considere adoptar uno o varios de los siguientes buenos hábitos que se recomiendan en el boletín "UC Berkeley Wellness Letter". Son sencillos y todos pueden contribuir a que usted y los suyos gocen de mejor salud este año.
· Mantenga las pastillas de suplementos de hierro fuera del alcance de los niños. Los suplementos que contienen hierro son una de las principales causas de envenenamientos entre niños. Cinco pastillas con un alto contenido de hierro pueden ser fatales para un niño pequeño. Entre 1986 y 1997 se reportaron 110,000 casos de niños que se tragaron pastillas de hierro accidentalmente; 35 fallecieron. ¡Proteja a los suyos!
· Fíjese en los demás medicamentos que toma si usa aspirina. Es posible que su médico le haya recomendado que tome diariamente aspirina, en una dosis baja, para prevenir un ataque al corazón. Si es así y necesita tomar algo para el dolor de cabeza o la artritis, tome más aspirina o algo que contenga acetaminofen (como el Tylenol). Evite tomar medicinas con ibuprofen o naproxen, ya que estas aumentan pueden aumentar el riesgo de úlceras estomacales y de otros efectos secundarios si se toman cuando toma aspirina (aunque no las tome al mismo tiempo). En todo caso, consulte a su médico antes de tomar regularmente y por tiempo prolongado cualquier medicina para el dolor.
· Enjuáguese los dientes después de mascar tabletas de vitamina C. De ser posible, cepílleselos de inmediato o, por lo menos, enjuáguese la boca. La vitamina C masticable puede producir suficiente ácido en la boca como para empezar a disolver el esmalte de los dientes.
· Considere comprar frutas y verduras enlatadas. Gracias a avances tecnológicos, estos productos retienen la mayoría de sus minerales y vitaminas. Aunque el proceso de enlatado comercial destruye cierta cantidad de vitaminas, la pérdida de ciertos nutrientes es inevitable en toda preparación de alimentos. Las frutas y verduras frescas no son necesariamente más nutritivas, ya que muchas se cosechan antes de estar maduras, se transportan por miles de millas y se almacenan por períodos largos, lo que puede hacer que pierdan una gran cantidad de nutrientes. Entre las frutas y verduras enlatadas, la calabaza, espinacas, betabeles, frijoles, maíz y piña, entre otras, resultan ser bastante nutritivas. Al escoger sus favoritas, fíjese en la cantidad de sodio que contengan ya que puede ser mucho.
· Escoja con cautela alimentos preparados localmente que se vendan como "dietéticos", "ligeros" o "con pocas caloras". Encuestas demuestran que tales alimentos (panecillos estilo muffin, helado, galletas, etc.) frecuentemente contienen mucha más grasa y calorías de lo que estipula la etiqueta. La falta de esfuerzos por hacer cumplir la ley al nivel local permite que muchas personas que preparan alimentos localmente puedan afirmar cosas exageradas e incluir datos falsos.
· Tenga cuidado con la espalda al ejercitar los muslos. En sus esfuerzos por lograr una mejor figura, olvídese de tratar de tocarse los dedos de los pies, sea doblándose al estar de pie o sentado en el suelo. Es más recomendable estirar los músculos de la parte trasera de los muslos haciendo el siguiente ejercicio para reducir la posibilidad de lastimarse la espalda: Acuéstese boca arriba con ambas rodillas dobladas y los pies en el suelo. Ponga ambas manos detrás del muslo derecho y trate de acercarlo lo más posible al pecho. Mantenga la pierna izquierda doblada con el pie en el suelo. Estire la pierna derecha, con el pie relajado, y continúe tratando de acercar el muslo al pecho. Mantenga esta posición de 10 a 20 segundos antes de bajar la pierna. Repita el ejercicio con la otra pierna.
· Asegúrese que los detectores de humo en su hogar estén funcionando bien. Si usted es como la mayoría de las personas, nunca examina sus detectores de humo para asegurarse que funcionan bien. Ponga a prueba la pila del suyo cada año y cámbiela por una nueva de manera regular, según las instrucciones del fabricante. Una buena manera de revisar si un detector funciona bien es con un probador en aerosol que produce humo simulado. Se pueden comprar por aproximadamente $5 dólares en las ferreterías. Cambie cualquier detector que tenga más de 10 años. Los hay por $10 dólares y son confiables, de pilas y tienen la más reciente tecnología.
· Consiga gafas apropiadas para conducir de noche si sus ojos son sensibles a los reflejos. Pida a su oculista que prescriba anteojos o lentes de contacto con una capa antireflectora. Si no requiere usarlos para conducir, compre gafas antireflejos sin aumento y guárdelas en el auto. No use lentes para el sol al manejar de noche.