Otra manera de involucrar a la familia en una forma de vida sustentable y comidas saludables es empezando un huerto de mesa en casa. El cultivo de brotes ha sido muy popular por décadas. Hoy día, las microhierbas o brotes son el tema de actualidad.
Las microhierbas son más largas que los brotes, pero más pequeñas que las hojas verdes tiernas para ensaladas. Se encuentran en restaurantes de moda y en supermercados gourmet, pero también pueden cultivarse fácilmente con suficiente luz, dice Dot Zanotti Ingels, jardinera maestra de UC en el Condado Marin. Los brotes, que se cosechan cuando tienen aproximadamente dos pulgadas de alto, añaden textura y sabor a ensaladas y sándwiches, se pueden mezclar con salsas para untar, usarse para adornar o espolvorear encima de la pizza.
“A los niños les gustan las microhierbas porque crecen rápido con recompensas rápidas”, dijo ella. “Desde la perspectiva nutricional, las microhierbas están repletas de vitaminas, minerales, enzimas y fitonutrientes.”
Para cultivar microhierbas, todo lo que usted necesita son contenedores, tierra, semillas y agua.
“A mi me gusta usar contenedores atractivos o macetas pequeñas para mantener el sitio donde las cultivo atractivo a la vista, pero los contenedores puede ser charolas de plástico recicladas de los alimentos o una maceta más ancha y no muy profunda”, dijo Ingels.
Ella sugiere los siguientes pasos:
- Llene el contenedor con una mezcla fresca y húmeda para macetas o con una mezcla de semillas para plantar, dejando sin llenar la última pulgada de la maceta. Otra opción es usar productos para cultivar brotes, sin tierra, como alfombrillas de cultivo, turba, vermiculita, perlita o fibra de coco.
- Esparza las semillas uniformemente hasta cubrir de un tercio a la mitad de la tierra o superficie de cultivo. (Comprar semillas en cantidad por Internet le ahorrará dinero).
- Ponga una capa delgada de tierra o mezcla encima de las semillas y presione hacia abajo ligeramente.
- Riegue con una botella con atomizador, manteniendo la tierra tan húmeda como una esponja exprimida.
- Comience con una cubierta transparente o sin ella; una vez que las semillas hayan germinado, mantenga el contenedor destapado.
- Coseche cuando las primeras hojas aparezcan, cortándolas con tijeras de cocina bien afiladas. Toma entre 7 a 21 días para que las semillas estén listas para cosecharlas.
La chia, berro, hojas de mostaza, rábano y recula son sólo algunas de las variedades utilizadas para cultivar microhierbas. Pam Geisel, coordinadora académica del Programa de Jardineros Maestros, sugiere probar con borraja, albahaca, cilantro y otras hierbas de hoja. Una buena planta para usar la primera vez es el brócoli ya que tiende a ser confiable en la germinación y sus brotes son fuertes en los primeros días cruciales.
Para asegurar el éxito y la salubridad en los alimentos, Geisel recomienda que los cultivadores de microhierbas le añadan compost a la tierra vieja y empiecen con tierra nueva en cada siembra.
“Volver a usar la tierra puede generar problemas como el mal de los semilleros y otros organismos como salmonella”, dijo Geisel. El mal de los semilleros es un término usado para denominar las enfermedades que matan a las semillas o plántulas. “Las microhierbas no tienen muchas raíces de manera que la tierra o las alfombrillas de cultivo se deben regar frecuentemente, pero sin mantenerla muy húmeda. Yo no consumiría los brotes si veo señales de moho o podredumbre.”
Preparado por Jeannette E. Warnert
Adaptado al español por Norma De la Vega
(Foto: Instituto de Alimentos y Ciencias Agrícolas de la Universidad de la Florida)